La nueva alcaldesa de Motril, Flor Almón, ha anunciado la elaboración por el
ayuntamiento de esta ciudad de una “Estrategia Integral de Desarrollo Urbano”.
Con dicho propósito ha convocado una “Mesa de Participación Ciudadana”, para divulgar
el diagnóstico sobre la ciudad y recoger opiniones de los vecinos invitados a
dicha Mesa.
La reducción del paro y la creación de nuevos
puestos de trabajo tienen que ser los primeros objetivos de cualquier estrategia socioeconómica relativa a
Motril. Ello es así no solo con carácter
general, sino también porque el nivel de empleo de esta ciudad está por debajo
de la media de España, Andalucía y provincia de Granada.
Los indicadores de empleo disponibles en España son los derivados de la
Encuesta de Población Activa (EPA) del INE y de los datos de afiliación a la
Seguridad Social, publicados estos últimos con frecuencia mensual por el Ministerio de Empleo. Los
resultados de la EPA no llegan al nivel local, por lo que hay que acudir a las
cifras de afiliación para aproximarse a la situación del mercado de trabajo a
dicho nivel.
En
junio de 2015 había en Motril 17.580 afiliados a la Seguridad Social, un 3,2%
más que en el mismo mes del pasado año. Motril perdió unas 4.000 afiliaciones
en lo peor de la crisis, en concreto entre 2008 y 2012. Desde 2013 el total de afiliaciones está
creciendo, pero se está lejos todavía de las 21.300 con que terminó el ejercicio de 2007.
Llama la atención la composición del empleo en Motril, destacando
primero el elevado número de afiliaciones al Sistema Especial Agrario, 3.983 en
Motril, el 22,7% del total (4,3% en España). Destaca asimismo, en segundo lugar, la mayor presencia de
autónomos, 3.978, el 22,6% del total (18,6% en España). Como consecuencia de lo
anterior, el peso del régimen general de asalariados a la S. Social (52,4%) está
en Motril por debajo de la media, lo que implica una menor presencia
empresarial que en el total de España (74,2%).
Lo más relevante es que el total de afiliados existente en Motril supone solo el 28,9% de la población total, según los
Padrones Municipales de Población. Dicha tasa de empleo está por debajo de la
tasa media de la provincia de Granada (32,1%), de Andalucía (32,4%) y de España
(36,5%). Si Motril tuviese la tasa de empleo de Granada-provincia habría unas
dos mil afiliaciones por encima del nivel actual.
En resumen, Motril tiene menos empleos que la media de la provincia de
Granada y una presencia más que elevada
de cartillas agrarias, junto a un elevado número de autónomos. La situación del
empleo en Motril es a todas luces mejorable,
lo que depende de numerosas variables y no solo de lo que haga un ayuntamiento, aunque este
puede desarrollar políticas que contribuyan
a generar empleo, que será mejor cuanto
más sostenible resulte.
Desde
hace bastante tiempo el urbanismo del ayuntamiento de Motril es muy proclive a la construcción
residencial y no parece demasiado atento a la implantación de empresas en esta
ciudad. Se identifica erróneamente desarrollo con la construcción de viviendas y
se aprovecha menos de lo deseable la presencia del puerto.
Sería conveniente que la “Estrategia Integral
de Desarrollo Urbano”, una iniciativa de interés, no se limitase a señalar las muchas viviendas a construir. Para que las nuevas
viviendas se vendan hacen falta empleos que tengan cierta estabilidad. Tampoco
le vendría mal a Motril apostar más por la ciudad compacta y dejar de hacerlo por
un urbanismo difuso, que consume suelo y genera más costes al
municipio.